La mediación, en términos generales es un mecanismo de solución de conflictos a través
del cual un tercero ajeno al problema interviene entre las personas que se encuentran
inmersas en un conflicto para escucharlas, ver sus intereses y facilitar un camino en el
cual se encuentren soluciones equitativas para los participantes en la controversia. Es el
intento de poner fin a una diferencia a través de la participación activa de un tercero que
recibe el nombre de mediador, quien trabaja para encontrar puntos de consenso y hacer
que las partes en conflicto acuerden un resultado favorable.
En estos casos, el tercero neutral elegido no tiene ninguna calidad especial según la ley y
sus propuestas no son de obligatoria acogida, reduciendo su función a buscar una
solución aceptable para las partes.
La Mediación Escolar es un mecanismo autocompositivo de solución de conflictos que se
caracteriza por la intervención de un tercero neutral, imparcial e independiente
denominado mediador/a, que facilita el encuentro entre las partes que están en
discrepancia para que puedan comunicarse efectivamente y poder entre ellos mismos,
definir los acuerdos de convivencia que satisfagan los intereses y necesidades de todos
los involucrados.
En las comunidades educativas se encuentran estudiantes de diferente origen y
condición, indígenas, afrocolombianos, extranjeros, algunos que han vivido el
desplazamiento forzado, de edades y condiciones económicas diversas y en medio de
esa gama, a través de la mediación escolar se busca estructurar soluciones
interculturalmente satisfactorias que permitan el reconocimiento de la diferencia y el
respeto por el otro.